Felipe VI pide «pedagogía contra la radicalización» en el 20 aniversario de los atentados

os atentados de Madrid, cometidos con explosivos en trenes de cercanías, son los mayores ocurridos en España y uno de los mayores perpetrados en Europa, lo que motivó que el 11 de marzo fuera declarado Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.

El jefe del Estado español defendió hoy, en un acto en Madrid, la necesidad de preservar la memoria de las víctimas, con memoriales, contenidos curriculares en las escuelas y testimonios de los afectados por el terrorismo en diversos foros y plataformas públicas.

«Es la mejor pedagogía contra la radicalización», defendió el monarca, en un acto organizado por la Comisión Europea con motivo del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.

Felipe VI pidió atención y protección «efectiva» a las víctimas del terrorismo, a las que consideró quienes mejor representan «la grandeza de la democracia y su fuerza».

«Las víctimas del terrorismo son un referente ético en nuestros sistemas democráticos y valores humanos. Simbolizan la necesidad y el compromiso permanente con la defensa de la libertad y el Estado de derecho», afirmó, en un acto al que también asistió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, las comisarias europeas Margaritis Schinas e Ylva Johansson y representantes de asociaciones de víctimas de atentados terroristas cometidos en varios países europeos.

Para Felipe VI, las víctimas del terrorismo, «con su dignidad», son «quienes mejor representan tanto la grandeza de la democracia, su fuerza, como la determinación de avanzar en la convivencia pacífica».

El comisario y vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, afirmó, por su parte, que los ataques cometidos en Europa por extremistas pretenden «socavar la democracia y las libertades», pero sin éxito, porque «estos valores son el ADN de el estilo de vida europeo».

«En un mundo cada vez más oscuro e incierto, nuestra mejor arma y bandera es nuestra democracia, que no dejará de ondear», afirmó el comisario, que apeló a la unidad europea.

«El terrorismo no puede dividirnos. Al contrario, requiere más unidad», afirmó.

Antes, en la inauguración del acto, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, afirmó que el 11 de marzo es un día para recordar a las víctimas, pero también para exigir y defender la convivencia y el respeto, frente al fanatismo y la intolerancia.

«Los principios de convivencia y respeto son el mejor antídoto contra la violencia terrorista y su caldo de cultivo: el fanatismo, la irracionalidad y la intolerancia», afirmó.

Para el jefe del Gobierno español, hay que defender y exigir el respeto a los Derechos Humanos y a las señas de identidad europeas de hoy, que «los fanáticos, de cualquier procedencia, nunca podrán destruir».

«Nadie puede acostumbrarse a esta violencia ciega, nadie debería acostumbrarse a vivir con la barbarie», subrayó, tras recordar cómo vivían España y Madrid el 11 de marzo de 2004.

España celebra hoy el 20 aniversario de los atentados ‘yihadistas’ del 11 de marzo de 2004 (conocidos en el país como 11-M) con varios actos por todo el país, además de retransmisiones especiales en radio y televisión.