Sacerdote ejecuta obras y pinta frescos que tienen 300 años de historia

Sacerdote ejecuta obras y pinta frescos que tienen 300 años de historia

Una hermandad religiosa denunció los daños causados ​​a pinturas de 300 años de antigüedad en la iglesia parroquial de San Antonio de Padua, en el municipio de El Tanque, en Tenerife. La culpa es de las obras de restauración realizadas por el párroco local, que pretendía eliminar las humedades de la infraestructura.

Los cuadros en cuestión estaban protegidos con una capa de pintura especial, que formaba una especie de cubierta.

Ahora, el párroco local ordenó que se hicieran obras en la iglesia, ya que la cubierta que protegía los frescos se estaba despegando y las paredes estaban muy húmedas.

El sacerdote dijo que cuando los trabajadores comenzaron a raspar la pintura y descubrieron que debajo había frescos, le preguntaron si debían pintar encima y él dijo que sí, y que usaron una «pintura especial» contra la humedad que recomendaba la tienda de ferretería.

El objetivo afirma que consultó a la vicepresidenta y concejala de Obras y Servicios del Ayuntamiento de El Tanque, Jennifer Rosales, sobre los trabajos que pretendía realizar en el templo, y que ella sólo le advirtió que no pintara una franja de los frescos que habían quedado al aire libre, y que debían recurrir a una empresa especializada.

La concejala en cuestión aclaró en las redes sociales que le alertó del carácter «delicado» de la actuación que pretendía realizar, dado que la parroquia es Bien de Interés Cultural, y le facilitó los contactos de varias empresas especializadas. Sin embargo, dice que ignoró sus instrucciones.

En la localidad muchos condenan y culpan al padre Héctor Lunar Guevara, a quien dicen es el único responsable de lo sucedido y a quien acusan de haber faltado el respeto previamente a los creyentes locales.

Publicaciones Similares